Djokovic y Shelton pasan a cuartos de Wimbledon tras intensos partidos

Novak Djokovic alcanzó los cuartos de final de Wimbledon por decimosexta vez, pero tuvo que esforzarse en la Pista Central para superar al australiano Álex de Miñaur el lunes.

El serbio, de 38 años, tuvo un comienzo pésimo y perdió el primer set en 31 minutos, pero al final se hizo con el control de la batalla y ganó por 1-6, 6-4, 6-4 y 6-4, manteniendo vivas las esperanzas de conquistar el título número 25 de Grand Slam.

Con Roger Federer observando desde el palco real -el jugador cuyo récord de ocho títulos masculinos intenta igualar Djokovic-, el juego habitualmente quirúrgico del balcánico falló de forma estrepitosa al principio.

El australiano continuó causando dolores de cabeza a Djokovic, pero el sexto cabeza de serie encontró la forma de ganar los dos siguientes sets, llenos de peloteos desde la línea de fondo.

Incluso entonces parecía que Djokovic se vería arrastrado a un quinto set, ya que De Miñaur se puso con una ventaja de 4-1 en el cuarto set, pero el serbio cerró la puerta justo a tiempo, ganando cinco juegos seguidos para conseguir su pase a cuartos.

Djokovic se medirá ahora con Flavio Cobolli, que inauguró antes una jornada histórica para el tenis italiano eliminando por 6-4, 6-4, 6-7(4) y 7-6(3) a Marin Cilic, de 36 años y finalista aquí en 2017, en una soleada pero ventosa Pista Dos.

Rebosante de energía, Cobolli, de 23 años, se adueñó de la pista durante los dos primeros sets, lanzando fuertes golpes de fondo que el excampeón del Abierto de Estados Unidos sólo pudo devolver dando grandes zancadas y cortando la pelota, incurriendo en demasiados errores.

Cilic no mostró nunca la chispa que le llevó a derrotar en el partido previo al cuarto cabeza de serie, Jack Draper. Por contra, Cobolli demostró que su arsenal es mucho más que sólidos golpes de fondo, desplegando una serie de voleas y dejadas que hicieron las delicias de un público cada vez más agradecido.

Una sola rotura de saque en cada uno de los dos primeros sets le colocó firmemente en cabeza, antes de que Cilic lograra hacerse con la tercera manga en el tie-break.

Cilic rompió de nuevo y se puso 4-3 en el cuarto set, mientras la frustración de Cobolli empezaba a aparecer y la sombra del croata se agrandaba. No obstante, el italiano, cabeza de serie número 22, rompió de nuevo el saque de su rival de forma inmediata gracias a un golpe ganador de revés.

Recuperado, forzó un segundo tie-break y esta vez no cometió ningún error, logrando la victoria cuando Cilic cometió un error no forzado, su 64º del partido.

Por su parte, el estadounidense Ben Shelton, décimo cabeza de serie, llegó por primera vez a cuartos de Wimbledon al vencer por 3-6, 6-1, 7-6 (1) y 7-5 a Sonego.

Shelton, que ya había alcanzado las semifinales en los Abiertos de Australia y Estados Unidos, se mostró algo irregular en su primer set, pero el potente zurdo recuperó su longitud y atacó más la red en un dominante segundo set, y luego remontó en el tie-break del tercero.

En un cuarto set muy igualado, Shelton, que lucía una camiseta sin mangas al estilo de Rafael Nadal, hizo una demostración de su exuberancia atlética en varias ocasiones para romper y llevarse el partido, rugiendo de triunfo.

"Fue difícil. Cada vez que yo necesitaba un gran punto, él aparecía con un tiro destacado, y quizá lo mismo viceversa, pero fue muy divertido", afirmó. "Estoy contento con la forma en que jugué. Sentí que era mi mejor tenis, mi mejor devolución, y es lo que voy a necesitar para continuar en este torneo. Terminar el partido con ese tipo de juego me da mucha confianza".

Sinner gana por abandono

Jannik Sinner, primer cabeza de serie, alcanzó los cuartos de final de Wimbledon porque el búlgaro Grigor Dimitrov se retiró de su encuentro por una lesión en el pectoral tras dominar gran parte del choque y ponerse por delante 6-3 7-5 2-2 el lunes.

Sinner llegó a la Pista Central sin haber perdido el saque en 36 juegos, pero Dimitrov le rompió en el primer intento para ponerse 2-0 por delante. El elegante jugador de 34 años jugó un tenis casi impecable para cerrar el primer set y dejar al público boquiabierto.

Sinner, aquejado de un problema en el codo derecho tras una caída en los primeros compases del choque, tuvo que pedir un descanso médico a los cinco juegos del segundo set tras verse sacudido de nuevo por Dimitrov, decimonoveno cabeza de serie.

Acorralado, Sinner salió a luchar, pero el partido cambió en un instante cuando Dimitrov mantuvo el saque para igualar 2-2 y cayó al césped lesionado, antes de arrojar la toalla entre lágrimas.